Quemar la noche
Publicado por MaryJane en 21:19 | Etiquetas: visionesmartes, 24 de junio de 2008
Ayer noche fue la verbena de San Juan. Me uní al ritual de unas amigas en el que quemamos nuestros lastres escritos en un papel enrollado en hilo rojo.
Nunca he sabido muy bien si hay que quemar lo bueno o lo malo, cuántos rituales distintos se recomienda hacer ni a qué hora exactamente se supone que se han de llevar a cabo.
La cuestión es el inmenso deseo y la necesidad de renovar la savia que llevamos dentro para purgarnos de lo que repudiamos, para llamar a las buenas nuevas, para acercarnos un poco más a nuestros deseos y casi tocarlos con la punta de los dedos.
San Juan es una excusa perfecta para dejarnos llevar un poco por la pasión del momento, por los antepasados paganos que nos inducen, en cierto modo, a hacer lo que el espíritu nos dicta.
Observar el fuego, crepitando con tanta furia, salvaje como un amante enloquecido y ciego de amor, es siempre hipotizante, casi mágico. Es un momento de comunión con un elemento purificador, al que rogamos, internamente, que nos purifique también, que nos limpie.
Nos permitimos la licencia de pedir secretos deseos al fuego, quizá los más terrenales, quizá los más ocultos, nos permitimos pasar de la ralla y descuidamos por un momento la máscara que nos cubre de sobriedad y decoro.
El fuego te llama, te pide que te acerques y te entregues, pero tu cuerpo, que es de carne, se niega, incapaz de comprender los designios del alma y lo místico...
Menos mal que tenemos un cuerpo de carne y una mente alerta, que si no muchos acabarían en la hoguera...
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13 comentarios:
Y pensar que yo nunca he celebrado la noche de San Juan, es más, anoche estuve en el cine.
Pues me acabo de enterar de la tradición de quemar algo (digo algo por la duda que tienes tu de si se quema lo bueno o lo malo, jeje), parece mentira que a mis años me acabe de enterar en qué consiste esta noche. De todas maneras, mejor no haber ido, ya que ahora mismo no tengo nada que necesite cambiar en mi vida, todo lo contrario, ojalá se mantuviese siempre como está ahora!
Me alegro de volver a ver una entrada en tu blog, MaryJane!
Un beso!
yo no sabía lo de los deseos, si sabía que la peña salta hogueras, pasa por brasas descalzo, vamos lo habitual.jajajja. Yo siempre lo he celebrado pero haciendo un guateque, este año me fuí a Malgrat, aunque estaba pronto en casa los dichosos petardos no me dejaron dormir en la noche más corta, que se me hizo muuuuuuuuuy larga entre sábanas y la voz de fondo de una orquesta "perrea perrea".
Me alegra que vuelvas aunque sea purificandote con los elementos.
Excelente frase de la semana, de los simpsons.
Yo tampoco he celebrado nunca esta fiesta, quizas poruqe aqui en madrid no es que sea muy popular. En cambio mis amigos de Bilbao la esperan ansiosamente año tras año.
Encantado de volver a leerte ^^
Interesante reflexión, como todas las que haces Maryjane. A mí siempre me ha gustado la idea de que todavía existan fiestas paganas en nuestra cultura. El culto al fuego no deja de ser un culto a la madre naturaleza y a sus elementos, creencias antiguas que adoraban la figura de la mujer como creadora de la tierra (de ahí la expresión madre tierra o madre naturaleza y porque la mujer es la creadora de vida). Lástima que con los siglos la religión cristiana decidiera abolir estas creencias y las llamara paganas (algo absurdo) y desterrara la figura de la mujer como matriz de la vida y de ahí se impusiera la figura del hombre. Las religiones "paganas" adoran la naturaleza y lo natural y tangible, lo que sustenta nuestras vidas, una pena que no hayan más cultos a los elementos naturales que ha creado nuestra tierra y se rinda adoración a ídolos inexistentes que solo siembran el odio y rencor entre nosotros.
Yo hice lo de la hoguera jejej, tiré al fuego lo malo y lo bueno al mar. Un detalle curioso, puse lo mismo en los dos papeles, pues quiero seguir tal como estoy ejejje.
¡Un saludo muy grande!
no sabía que en san juan se quemaran las cosas malas en la hoguera... yo ese día siempre he quemado las penas en alcohol.. y también las alegrías jeje.
un besote y sigue escribiendo a menudo!
Qué mas da lo que arda. Fuego. Y punto. Y el año que viene más.
Hola Maryjane, yo creo que es mejor quemar las cosas malas en la hoguera. Lo bueno, mejor guardarlo, jejeje. Supongo que el fuego tiene algo de "mágico" para muchas culturas desde siempre.
Un abrazo y que sigas publicando muchas más entradas
Eldemo; Pues nada, si estás bien como estás genial Eldemito, yo me alegro por tí, pero las hogueras y las fiestas que se hacen alrededor son geniales! Un besazo!!
Sunne; La cuestión es celebrar, lo demás es simbología, y yo tengo que celebrar una nueva vida, que más me vale... Un abrazo grande!!
Moltisanti; Te recomiendo que alguna vez te unas a tus amigos y lo celebres, vale la pena!! Un abrazo!!
Dante; Qué bien hablas, me encanta. No se, yo creo que lo de los rituales son íntimos, y que cada uno los realiza como quiere, porque así debe ser. Grácias, majo.
Un besazo!!!
Gisela; Yo también quemé penas en el alcohol, además del papelito con las cosas malas, jejejeejeeje... eso fue la parte más "pagana".
Un abrazo!!
Supersalvajuan; Al fuego lo que es del fuego. Punto. Grácias por esta primera visita!!
JM; Pues sí, lo malo hay que quemarlo, espero que nos funcione!
Un abrazo!!
Odio San Juan. La idea de ver la foguera como elemento purificador que nos limpie me parece preciosa. Lástima que siempre llega el mañana, y los pecados con ella.
Qué le haremos. Somos humanos y el recuerdo es uno de nuestras virtudes (o lastres).
Crítico; La verdad es que no creo en los pecados, así que no creo que tenga que ir a ningun sitio para purgarme de ellos, cada cual allá con su conciencia.
Estoy de acuerdo con lo del recuerdo. Un saludo!!
¿Y surge efecto?
Mary Jane, ¿que tal por allí con lo de la eurocopa? mucho Villa y mucha sidra???
Beth; eso espero, amiga, jejejeje!!
Sunne; pues sí, mucha sidra, mucho Villa, hasta yo vi el partido y todo!!! Jjejejejeje, añ final sí pudimos...
Besos a ambos!!!
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